El Valle del Guadalentín contará con unas Directrices para la ordenación sostenible de su territorio (2007)

La Comarca del Valle del Guadalentín y el Gobierno regional inician la elaboración de unas nuevas Directrices y un Plan de Ordenación del Territorio para armonizar sus actuaciones en materia de gestión de recursos naturales, patrimonio cultural y cohesión económica y social. El consejero de Desarrollo Sostenible y Ordenación del Territorio, Benito Mercader, ha presentado a los alcaldes de Lorca, Puerto Lumbreras, Totana, Alhama de Murcia, Librilla y Aledo, las nuevas pautas que serán de aplicación en esta zona, que abarca una superficie total de 2367 kilómetros cuadrados, lo que representa algo más de un 20% del territorio regional.

Asimismo, Benito Mercader anunció la creación de un Foro de Participación Pública, en el que estarán representados los consistorios de la Comarca y las administraciones públicas implicadas en el proyecto y que “operará como una entidad que recopilará recomendaciones e ideas con la finalidad de obtener un resultado óptimo de los trabajos. Además, durante el proceso de redacción de las Directrices, se han previsto cauces para la colaboración de los agentes sociales y el público en general”.

El plazo para la redacción de las Directrices es de veinte meses. El consejero señaló que la elaboración de este documento director de la ordenación territorial del Valle del Guadalentín “es una actuación integrada en las políticas regionales de ordenación que suma a las ya aprobadas Directrices y Plan de Ordenación Territorial del Litoral y las del Suelo Industrial de la Región de Murcia”, y añadió que “se está iniciando la tramitación de las correspondientes a la Comarca del Noroeste; se están elaborando las de la Comarca del Altiplano y también se está trabajando en las Directrices de la Comarcas de Río Mula, Vega Alta y Oriental; y en las del Área Metropolitana de Murcia”.

El consejero explicó que las Directrices para la Comarca del Valle del Guadalentín se encuadran en el marco de trabajo en política de ordenación territorial creado por la Estrategia Territorial Europea, el Plan Estratégico Regional Horizonte 2010 de la Región de Murcia y nuestra Ley del Suelo Regional.

“Con medidas como ésta pretendemos alcanzar la Sostenibilidad Territorial y Ambiental apoyándonos, por una parte en los instrumentos que desarrolla nuestra Ley del Suelo Regional y por otro en la voluntad de construir, de manera consensuada, el futuro del modelo del territorio de la Región de Murcia”, apuntó.

La Comarca del Valle del Guadalentín cuenta con un relieve marcado por grandes contrastes con una altitud que oscila entre 89 y 1579 metros de altitud, con áreas de elevado valor natural y ecológico como las Sierras del Gigante, de la Torrecilla, del Cambrón, de la Tercia, de Espuña, de En Medio, de Almenara o de Carrascoy; con un total de 10 LIC (Lugares de Importancia Comunitaria) y 5 ZEPAS (Zona de especial protección de aves). Su principal eje estructurante de comunicaciones viene marcado por la autovía de Andalucía, en torno a la cual se asientan poblaciones como Alhama de Murcia, Totana, Librilla y Lorca. Existen en la Comarca importantes asentamientos industriales y amplias extensiones destinadas a la agricultura.

Además de la gestión de los recursos naturales, las directrices recogerán, entre otros aspectos, la ubicación de los centros comerciales, cómo y en qué lugares se tiene que llevar a cabo el crecimiento industrial, y determinará qué nuevas infraestructuras son necesarias para estos municipios. Una vez aprobadas, las Directrices de Guadalentín pasarán a formar parte del Plan Estratégico como uno de sus objetivos y vinculará a todas las administraciones.

Para el consejero, las Directrices buscan “conjugar todos los factores existentes creando una organización coherente de los usos y actividades, la protección y revalorización del paisaje, la ordenación de los recursos naturales, la rehabilitación y redotación de los núcleos tradicionales, así como un desarrollo turístico cualificado. Otros de los objetivos serían aumentar la calidad de vida de la población, mejorar las infraestructuras básicas y las dotaciones de accesibilidad y movilidad y diseñar una redotación de los recursos hídricos”.